"La tele es verdad que la he apagado. Sobre todo, LaSexta la apagué. Gente como Ferreras ha hecho mucho daño a la confianza de la población en el periodismo. Ferreras, Ana Pastor, y sus acólitos que están allí, diciendo "Es burdo pero vamos con ello". ¿Pues qué piensa la gente? Que estos son unos corruptos igual que los políticos, igual que los jueces... Es una anomalía que sigan en antena, pero es que no tienen ningún escrúpulo, no tienen vergüenza. A Ferreras y a sus acólitos no les perdono que hayan arrastrado la profesión por el fango."